Si estás pensando en incluir a tu dieta un par de jugos al día te compartimos algunos puntos que no puedes dejar pasar.
Tus jugos tiene muchas calorías
Mientras que algunos jugos, tienen sólo 80 calorías y 2 gramos de azúcar en una ración de 16 onzas, otras bebidas del mismo tamaño tienen la friolera de 420 calorías y 54 gramos de azúcar.
El resultado final:
Depende de ti revisar los ingredientes y la información nutricional y tomar una decisión. Se recomienda buscar una bebida que tenga entre 50 y 100 calorías, menos de 10 gramos de azúcar y al menos 3 gramos de fibra.
Además, intenta elegir jugos que sigan la regla 80:20, es decir, que el 80% de los ingredientes sean vegetales y sólo el 20% sean frutas. Limitar la fruta en tu bebida puede ayudar a mantener los niveles de insulina estables y evitar el hambre.
Estás bebiendo pesticidas y productos químicos
Aunque un estudio reciente sugiere que hay muy pocos beneficios nutricionales en el consumo de productos orgánicos, los pesticidas utilizados en los cultivos convencionales se han relacionado con una serie de problemas de estómago, incluyendo dolor abdominal, náuseas y diarrea.
Si tienes acceso a una tienda de jugos que utiliza productos ecológicos, es tu mejor opción, especialmente si te gustan los jugos que contienen frutas y verduras que encabezan la lista de la docena sucia, como las manzanas, las fresas, el apio, las espinacas y los pepinos.
No alteres tu rutina de ejercicios
Aunque siempre es una buena idea combinar el ejercicio y la dieta, si estás limitando severamente tus calorías (como mucha gente lo hace durante una limpieza de jugos) entonces es posible que quieras ajustar tu nivel de fitness. ¿Por qué? Podrías desmayarte o perder el conocimiento.
Tómate un día o dos de descanso en el gimnasio para dejar que tu cuerpo se adapte a tu nueva dieta y luego determina tu nivel de energía para un entrenamiento seguro. Puede que te encuentres con que no estás para tu carrera semanal, pero te sientas seguro de que podrías hacer una clase de yoga sin peligro. Sigue tu instinto y no te excedas.
No complementas con grasas o proteínas
Los jugos no contienen muchas proteínas ni grasas, lo que puede hacer que te sientas hambriento y aletargado. Si te encuentras con que ese es el caso, pide a tu mixólogo que añada algunas semillas de chía o de lino molidas a tus jugos. Ambas opciones aportarán proteínas, fibra adicional, ácidos grasos omega-3 antiinflamatorios y antioxidantes sin cambiar el sabor.
Además, las grasas saludables tardan más en digerirse y ayudan a mantener estables los niveles de azúcar en sangre, lo que te ayuda a sentirte más lleno, durante más tiempo.
